Zero waste challenge: qué puedes hacer para ser más sostenible
Hoy, en nuestra sección Sostenibilidad te queremos acercar otro concepto fundamental si quieres que tu actividad profesional (y también la personal) sea lo más sostenible posible y no deje huella en el medio ambiente. Además, te propondremos un reto. Se trata del Zero Waste (traducido como desperdicio cero). Como su nombre indica, es una filosofÃa de vida que fomenta el reciclaje y la reutilización de todos los productos. Nada se puede desechar directamente sin antes darle una segunda vida a través de la reutilización (dando nuevos usos a los objetos), el reciclaje (de papel o de materia orgánica) e incluso la donación. El objetivo, al final, es que nada acabe en la basura.
Los beneficios del zero waste son evidentes. Además de contribuir en la protección del medio ambiente (disminuyendo el consumo de recursos naturales y evitando que los desechos vayan a parar a la naturaleza), también fomenta un uso más racional de los recursos. No se basa en generar nuevas materias primeras, sino en aprovechar lo existente para poder hacer nuevos productos.
Un objetivo zero waste real necesita del apoyo de gobiernos y grandes empresas, para que lo incorporen como filosofÃa en decisiones y leyes los primeros y en sus procesos productivos las segundas. Pero todo el mundo puede aportar su granito de arena en conseguir el objetivo de cero desperdicio.
Y precisamente el reto que te queremos proponer hoy es ese: pensar qué puedes hacer en todas tus actividades (en casa y en el trabajo) para conseguir el objetivo de zero waste. Puedes empezar por lo básico: separar los residuos (orgánico, vidrio, papel y cartón, envases,…) y tirarlos al contenedor que toque para que puedan ser reciclados.
Además, también puedes unirte a la filosofÃa de la reutilización. Estas son algunas maneras de hacerlo: en la oficina, no tires al reciclaje ningún papel que pueda servirte para tomar notas en la otra cara o reaprovecha las carpetas y portafolios renovándolos con nuevas etiquetas. Reutiliza el papel de diario para embalar objetos que quieras esconder o para limpiar las ventanas. Si tenéis fuente de agua, opta por rellenar una botella de plástico reutilizable antes que gastar cada vez un vaso desechable. Apuesta por llevar tu bolsa de tela o plástico cuando vayas a comprar antes que utilizar una nueva en cada ocasión.
Si quieres renovar los muebles, piensa antes en restaurar los actuales para darles una segunda vida. Y si no quieres hacerlo tú, seguramente encontrarás a alguien que esté interesado en ellos. Haz lo mismo con tu ropa.
¿Te apuntas al reto de cero desperdicios?