Cada día, más directores de recursos humanos investigan mediante las redes sociales los perfiles de los candidatos a un puesto de trabajo. En sus espacios virtuales observan su forma de relacionarse, su actividad e intereses… Hasta tener una idea de cómo esa persona puede funcionar en el entorno laboral. Es decir, tu reputación online es clave.
Las redes sociales han cobrado importancia por muchos motivos. Sin duda, uno de ellos es la información que dan de nosotros a cualquier tercero que dedique tiempo a buscarnos. Por ello, es fundamental dedicarse a construir una reputación online que realmente refleje quiénes somos y cómo nos relacionamos.
Para comenzar a construir nuestra reputación online debemos rastrear y limpiar nuestra huella digital. Escribe tu nombre en google y observa los resultados: ¿realmente crees que las primeras entradas te distinguen del resto de candidatos? ¿Que información relevante a nivel laboral estás dando a conocer?
Repasa tu huella digital y mejórala para conseguir encajar en las empresas que más te interesan. Crea una marca de tu persona utilizando una fotografía que te diferencia, un eslogan sencillo e identificable y utiliza un conjunto de colores sistemáticamente. Este el procedimiento que utilizan las empresas para gestarse una imagen en internet, aprovéchalo y aplica este sistema a tu faceta digital.
En las redes sociales donde tienes presencia, aprovecha para generar redes. Olvídate del número de seguidores o amigos, no se trata de una cuestión cuantitativa, sino más bien cualitativa. Procura dar a conocer tu opinión y relacionarte con personas que crees que te ayudarán a forjarte la imagen que deseas proyectar. Aprovecha el potencial de las redes sociales para mejorar tu perfil laboral y, de paso, da a conocer tus ideas entre los amigos de tu red. Sin duda, tu reputación online y offline mejorará.
