Mejora la forma en que te relacionas
Las relaciones sociales son, seguramente, la base de nuestra vida. La familia, los amigos, los compañeros de trabajo, los colegas de afición… tenemos que relacionarnos con multitud de gente con personalidades distintas. Nuestras personalidad y el estado de ánimo que tengamos acaban condicionando cómo son todas esas relaciones. En Adeccorientaempleo creemos que, con un poco de esfuerzo, podemos conseguir que nuestras relaciones sean sanas y ser personas positivas. Para conseguirlo, puedes poner en práctica estos pequeños consejos.
Sé empático. Es fundamental aprender a identificar el estado de ánimo de una persona y ser capaces de ponernos en su lugar para comprender sus reacciones y sus comportamientos. Si somos capaces de hacerlo, seremos también capaces de relacionarnos de forma correcta con esa persona.
Escucha. La escucha activa es parte de nuestra inteligencia emocional y es fundamental si queremos relacionarnos de forma correcta con otras personas. Debemos focalizar nuestra atención en la persona y conversación que tengamos y comprender todos los detalles. También mostrar interés por lo que está diciendo formulando diferentes preguntas.
Con un poco de esfuerzo, podemos lograr que nuestras relaciones sean sanas y ser personas positivas Share on XLee los gestos. No olvides el lenguaje no verbal. Para mejorar la forma en que te relaciones, debes ser capaz de mirar y comprender más allá de las palabras. Observa los gestos, miradas y posturas de tu interlocutor para reconocer si realmente lo que dice se corresponde con aquello que siente y piensa.
Da tu opinión. Mejorar la forma en que te relacionas con los demás es también ser capaz de formular tu opinión, aunque diverja de la de tu interlocutor, de forma correcta, con respeto y aportando argumentos. Eso sí, debes exponer tu propio criterio y punto de vista cuando realmente sirva para aportar algo mejor.
Sé positivo y optimista. Intenta ser una de esas personas que impregna buen rollo cuando está cerca. Si sonríes, si hablas en positivo y si eres capaz de trasladar ese optimismo a tus interlocutores, estarás mejorando cómo te relacionas con ellos.
Cuida los detalles. Cuando te relaciones con los otros, cuida los detalles, para que acaben suponiendo una mejora en la vida de las personas que te rodean. Por ejemplo, elogia y no critiques, muestra respeto por los demás, ayúdales, reconoce cuando te equivocas, etc.