Puedes controlar tu consumo de agua en la oficina. ¿Sabes cómo?
“El agua es la fuente de la vida” o “el agua es un recurso escaso”. Son frases que pueden parecer un tópico, pero que son totalmente ciertas. Y es que menos del 3% del agua de nuestro planeta es dulce. De ahí la importancia de que administración pública, empresas y sociedad en general establezcamos medidas para ser cuidadosos con el consumo de agua, pero nosotros en nuestro trabajo también podemos contribuir y aportar nuestra “gotita”. ¡Nunca mejor dicho!
Cuando sales del lavabo, asegúrate de que has dejado el grifo bien cerrado. Piensa que un grifo que pierde una gota por segundo puede llegar a suponer un desperdicio de 30 litros al día. Así que si detectas un grifo que gotea en los servicios de las oficinas, avisa al personal de mantenimiento para que lo arreglen.
Si en tu empresa disponéis de grifos que se abren y cierran automáticamente, pasados unos segundos, puedes pedir que los cambien por grifos que se abran al detectar las manos. Y es que por un grifo abierto pasa, de media, entre 5 y 8 litros de agua que se van literalmente por el desagüe.
Si por el contrario los grifos de los baños se abren y cierran manualmente, mantenlos cerrados mientras te enjabonas las manos. De esta forma utilizarás solo el agua necesaria para lavarte. Piensa que 30 segundos son suficientes.
Si eres de los que se secan las manos con papel, ¡no utilices el inodoro como papelera! Evitarás usar agua extra si utilizas las papeleras que seguro que hay en los baños de tus oficinas.
También puedes hacer una petición similar a la de los grifos para los inodoros. Existen sistemas de doble descarga e interrupción de la descarga que permitirán utilizar menos agua en cada uso.
Si a la hora de comer utilizas “tupper”, no dejes el grifo abierto mientras enjabonas el recipiente de la comida. Y como no, cuando hayas terminado, asegúrate de cerrar bien el grifo.
Y finalmente, siempre puedes hablar con tus colegas para poner en marcha un programa de concienciación dentro de la empresa porque piensa que ¡el cuidado del planeta es cosa de todos!
