10 propuestas para mejorar la productividad y el rendimiento

Después de las vacaciones a muchos les cuesta arrancar. Si es tu caso, no te preocupes: este año la depresión postvacacional pasará menos factura a tu productividad laboral si pones en marcha las recomendaciones de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles (ARHOE). ¿Quieres saber cuáles son y ponerlas en marcha hoy mismo?

1. Cambia la mentalidad laboral

Un trabajador no es mejor por estar más horas en su puesto. Hay que desterrar la cultura del “presentismo”, tanto para los trabajadores como para una dirección que parece valorar este factor en perjuicio del cumplimiento de objetivos. Cada uno debe tener unos objetivos que cumplir y por ellos ha de ser evaluado.

2. El mejor trabajador es el que disfruta de su trabajo

La motivación y la implicación de los empleados en los objetivos de la organización son pilares fundamentales para un funcionamiento positivo de la misma. Aprovechar el talento y retenerlo aparece como algo imposible si un trabajador no se siente valorado y no goza de unas condiciones de trabajo que le permitan disfrutar de otros aspectos de su vida.

3. Fomentar la creatividad y la motivación

En relación con lo anterior, es importante que intentes evitar la monotonía, puesto que puede traducirse en una apatía que afecte a tu rendimiento. Si, por ejemplo, sientes que cada día es igual al anterior, ¿por qué no cambias de escenario o reorganizas tu espacio de trabajo? Pequeños cambios pueden ayudar a tu cerebro a funcionar mejor.

4. Racionalización horaria y productividad

Se ha comprobado que la implementación de medidas de racionalización horaria y conciliación supone para muchas empresas un importante plus de productividad e implicación de los trabajadores. ¿No es eso lo que estás buscando?

5. Modificar conductas en el trabajo

Si tienes un equipo a cargo y a veces sigues la máxima del ordeno y mando, debes cambiar tu actitud. Es responsabilidad de los directivos fomentar el trabajo en equipo, considerar al trabajador como aun “cliente interno” que necesita saber qué y por qué hace las cosas, etc.

6. El valor del tiempo

Si crees que el día debería tener más horas, quizá tengas problemas a la hora de gestionar tu tiempo. Aprovechar las primeras horas de la mañana para hacer las tareas más complejas, desconectar el WhatsApp o consultar el correo electrónico únicamente un par de veces al día pueden ayudarte (y mucho) a mejorar tu productividad.

7. ¿Son necesarias dos horas para comer?

En la mayoría de los casos, no. Tus trabajadores te agradecerán mucho comer en 30-45 minutos y salir unas horas antes. Además, rendirán mejor.

8. Reuniones de trabajo sí, pero las justas

Las reuniones son uno de los principales ladrones de tiempo de los empleados, por lo que sería recomendable que fueran más cortas y tuvieran una duración limitada. Es importante convocar tan solo las que realmente sean imprescindibles, con un orden del día que ayuda a organizar tiempos y tareas.

9. Evitar las distracciones

Como comentábamos en el punto 6, las redes sociales pueden ser el peor enemigo de tu productividad laboral. Haz todo lo posible para trabajar concentrado y, así, tendrás tiempo libre para poder atender tus asuntos personales, ya que no te llevarás a casa trabajo, ni físico, ni mental.

10. Todos somos responsables

Quejarse sin actuar no sirve de nada. Los trabajadores han de saber reivindicar unas condiciones de trabajo más humanas y racionales pero también ellos deben desterrar actitudes perjudiciales por muy asentadas que estén. Por su parte, los empresarios han de hacer un esfuerzo para lograr modernizar nuestro sistema laboral e implantar horarios que mejoren la productividad de sus trabajadores y no que la mermen.