Orson Welles, audacia y talento
Por su virtuosismo y audacia, Orson Welles (6 de mayo de 1915, Wisconsin) dejó una huella imborrable en el teatro, la radio y el cine. Su versión radiofónica de la “Guerra de los Mundos” así como sus películas “Ciudadano Kane” y “El cuarto mandamiento” marcaron hitos en la historia de los medios y se convirtieron en piezas de culto para los estudiantes y amantes del mundo audiovisual.
Actor, director, guionista y productor de cine, Orson Welles se destacó en todos los ámbitos como un artista de vanguardia y un genio creativo. En la época dorada de la radiofonía y con tan solo 23 años saltó a la fama con una versión de la novela de ciencia ficción “La guerra de los Mundos” (1938); causando gran revuelo y conmocionó entre la audiencia, gran parte de la cual se convenció de que se trataba de una emisión real de noticias y de que el planeta realmente estaba siendo atacado por extraterrestre.
Después de aquel histórico episodio en el que Welles demostró al mundo el poder de los medios de comunicación, deslumbrado por su audacia y talento, el dueño de la productora RKO le ofreció un contrato para producir y dirigir con libertad absoluta –algo extremadamente inusual para la época.
Frente a tal desafío y consciente de su falta de experiencia, Welles buscó buenos profesionales que le acompañaran y asesoraran allí donde él no tenía conocimiento suficientes. Gracias al voto de confianza de la productora, el director presentó “Ciudadano Kane” (1941), una pieza que se convertiría en un ícono cinematográfico. Sin embargo, la película, basada en la vida de William Randolph Hearst (magnate de la prensa, propietario de dos importantes periódicos), no logró una buena repercusión en taquilla debido a que el propio Hearst intentó prohibir su difusión.
Resultado del esfuerzo de un excelente equipo de trabajo magistralmente dirigido por Welles, el ahora mítico “Ciudadano Kane” sigue siendo considerado uno de los films más significativos de la historia del cine, tanto por el uso de pioneras técnicas de fotografía y montaje, como por su inusual y vanguardista estilo narrativo.
Orson Welles nunca temió afrontar los riesgos de transgredir las costumbres del cine y la audacia de su obra fue también criticada y, muchas veces, censurada. Su segunda película, “Cuarto Mandamiento” (1942), que reflejaba la vida de una familia norteamericana de principios del siglo XX, fue recortada por la productora hasta tal punto que el cineasta consideró que habían arruinado su obra. Sin embargo, también este film pasaría a ser considerado una obra de culto del director.
Pero el fracaso comercial de sus producciones provocó la ruptura del contrato de Welles y su equipo con la productora RKO y la carrera del director se estancó por un tiempo. Recién en 1948 el director lograría recobrar su lucidez cinematográfica con “La Dama de Shanghai” (1948), una sobresaliente muestra del cine negro protagonizada por Welles junto a Rita Hayworth –por entonces su esposa.
Debido al poco apoyo económico con el que contaba en su propio país, durante diferentes períodos, Welles se estableció en España, donde solía dedicarse a la actuación para poder financiar sus proyectos como director. Muchas otras obras destacadas conforman la extensa biografía de este virtuoso del cine, entre las que también se cuentan muchos proyectos inconclusos.
Orson Welles murió de un ataque al corazón en Los Ángeles, California, el 10 de octubre de 1985, dejando un legado cinematográfico inigualable signado por una increíble audacia y talento, que todavía hoy siguen inspirando a generaciones de cineastas.