“No me gusta mi trabajo” Encuentra las razones y sus posibles soluciones
Uno de los principales focos de estrés y angustia para una persona aparece cuando se plantea “no me gusta mi trabajo”. Enfrentarse cada día a una actividad que consume una buena porción de su jornada puede, en este caso, convertirse en un auténtico infierno.
Sin embargo, si te encuentras en esta situación, lo mejor que puedes hacer es tomar aire, identificar las razones por las que el trabajo te fastidia y buscar posibles soluciones. Seguro que, con un poco de ayuda, conseguiremos que te sientas mejor y puedas realizar los cambios que tanto necesitas.
Por qué no me gusta mi trabajo
En primer lugar hay que decir que no eres la única persona que se siente a disgusto con su actividad laboral. Miles de empleados pasan por lo mismo que estás pasando tú. La consecuencia es una bolsa de trabajadores que se sienten angustiados, deprimidos, irritados y con un elevado nivel de ansiedad.
De hecho, según un estudio realizado, el 60% de los españoles manifiestan sentir malestar en el lugar de trabajo.
Está claro que así no puedes continuar. Pero, para encontrar una solución, primero debes identificar cuál es tu propósito en cuanto a tu vida laboral y cuáles son las causas que están haciendo que te sientas tan mal desempeñando tu empleo.
Principales causas por las que no gusta un empleo
Como ya te hemos informado, son muchos los empleados que afirman no gustarles su trabajo. Las principales causas que dan son las siguientes:
- No están desarrollando una actividad relacionada con lo que estudiaron
- Existe un mal clima laboral
- No hay un ambiente de compañerismo
- No están bien liderados
- Los jefes son muy autoritarios
- Carecen de autonomía para desarrollar sus labores
- El trabajo implica un nivel muy alto de estrés
- El lugar de trabajo es incómodo
- Se han equivocado de profesión
- La empresa no promociona la estabilidad laboral
- El empleo está mal pagado
Por supuesto, pueden existir muchísimas más causas para que no te sientas a gusto con tu trabajo. Además, en cualquier caso, te toca a ti encontrar las razones por las que te sientes tan incómodo en tu empresa.
Lo primero que debes hacer para afrontar esta situación es tomarte un tiempo para reflexionar. No lo hagas a la ligera. Elige, por ejemplo, un fin de semana para dedicártelo a ti mismo y poder abordar el tema de una manera más relajada.
Piensa y anota los pros y los contras de tu empleo. Luego escribe las razones principales por las que tantas veces has dicho “no me gusta mi trabajo”. Compara esas cuestiones con la lista de pros y contras que has elaborado. Si puedes, intenta sacar todo lo positivo. También puede que te des cuenta de que tu situación dentro de la empresa no tiene solución. Según cada caso, tendrás que optar por diferentes vías para solucionar el problema y atajar el malestar.
¿Continúo con mi trabajo o cambio de empleo?
Estas dos alternativas dependen, en buena medida, de las respuestas que te has ido dando y las conclusiones a las que has llegado mientras analizabas tu situación. Puede que, a pesar de todo, apuestes por seguir en la empresa. Otra opción es que, finalmente, decidas cambiar de trabajo.
Sigo en mi trabajo
En este caso, debes plantearte que el trabajo es un medio para ganarte la vida y que ésta continúa más allá del horario laboral. Procura buscar los retos más ilusionantes dentro de tu actividad y procura disfrutar de esa parte que sí te merece la pena.
Mira aquellos puntos positivos que tiene tu compañía: flexibilidad horaria, buenos compañeros, un equipo sólido… Aférrate a estas cuestiones y desecha el pesimismo. A la larga te hará sentir más feliz.
Márcate algunos objetivos, aunque no te los hayan impuesto tus jefes. Alcanzarlos hará que tu estado de ánimo sea más positivo.
Si la situación es muy agobiante, procura hablar con los responsables de RRHH. Cuéntales cómo te sientes y pídeles ayuda. Tal vez consigas un destino más agradable, un puesto menos estresante… ¡Negocia!
Quiero cambiar de trabajo
Si ya has llegado a la conclusión de que no puedes continuar en tu puesto y que quieres cambiar de trabajo, deberás reafirmarte y comenzar con la tarea de encontrar un nuevo empleo.
Para ello has debido realizar un buen ejercicio de introspección que te permita responder a preguntas esenciales. No puedes lanzarte a la aventura sin más. ¿Por qué quieres cambiar de trabajo? ¿Qué buscas en una nueva empresa? ¿Cuál es el tipo de trabajo que deseas? ¿Estás formado para desempeñar esa nueva actividad?
Al final debes tener muy bien definido el perfil que estás buscando. Debes saber si buscas un cargo de responsabilidad, tener empleados a tu cargo, las funciones que deseas realizar, el tipo de empresa que requieres, el sueldo que pretendes…
Finalmente, con estos datos objetivos en la mano, dedica un tiempo a actualizar tu CV y comienza tu búsqueda activa. Tómatelo como un trabajo más y pronto estarás disfrutando de tu nuevo puesto de trabajo.