Mejora continua y productividad. Tod@s hablamos de ello.
En el entorno actual se habla mucho de mejora continua, pero la realidad nos dice que todavía tenemos un largo camino que recorrer. La razón es que este concepto debe convertirse en algo tangible. Además ha de incorporarse como un proceso natural en todas las organizaciones.
Qué es la mejora continua
Quisiera comenzar por el principio. La mejora continua debe ser un enfoque, una forma de trabajo, una filosofía… En cualquier caso debe servir para la mejora de los procesos operativos. Hay que entender que debe basarse en la necesidad de revisar continuamente lo que hacemos.
Para su aplicación nos podemos apoyar en diferentes metodologías, principalmente las de Lean y SixSigma. Por medio de la mejora continua logramos una revisión en profundidad de nuestros procesos (qué y cómo lo hacemos). También identificamos todo aquello que no aporta (muda o desperdicio).
Una vez hemos dado este primer paso, el siguiente, y muy importante, es que comencemos a medirlos. Con estas mediciones podremos marcarnos objetivos y, por tanto, comenzar a confrontar la realidad de nuestros datos con nuestras metas.
¿Qué ocurre con las desviaciones?
En este proceso, lo más probable es que nos encontremos con desviaciones. En contra de lo que pueda parecer, no tiene por qué suponer algo negativo. Digo esto porque estas desviaciones nos ayudan a detectar los aspectos de mejora.
De este modo, tenemos la posibilidad de concretar los planes de acción necesarios. Podremos, para ello, apoyarnos en herramientas de mejora continua, Diagrama de Ishikawa, etc. Ello nos ayudará a definir el uso de otros recursos para la mejora continua que nos permitan la optimización de esos aspectos (por ejemplo, Kanban, Poka-Yoke…)
¿La mejora continua es una moda pasajera?
Lo cierto es que se puede caer en la tentación de preguntarse de qué va todo esto. ¿Se trata tan solo de una tendencia más? ¿Es una moda pasajera o es algo más? La respuesta debe ser rotunda.
No es una moda que viene y se va. Estamos ante un proceso que se viene trabajando desde hace décadas. Se pueden encontrar vínculos desde un punto de vista histórico. ¿Cómo abastecían los americanos a sus tropas en la II Guerra Mundial? ¿Cómo salieron los japoneses de ese terrible momento de la historia tras su derrota y sin recursos? O pensemos en marcas tan potentes como Toyota.
En realidad, no es algo nuevo, pero es cierto que en la actualidad se ha convertido en una necesidad de todas las organizaciones. Ello es así porque ahora, más que nunca, hemos de ser más productivos y eficientes. Pero no de cualquier manera. Hay que comprender que debemos lograr más por menos, con una mayor calidad y flexibilidad.
La importancia de la fuerza de trabajo
En algunos entornos, cuando se habla de productividad y eficiencia, se vincula automáticamente a robotización o a mayor exigencia para la fuerza laboral. Esta reacción está muy lejos de la realidad.
Si logramos ser más productivos y eficientes, las organizaciones podrán dar respuesta a nuevos retos. Bajo estas premisas, sin duda alguna, nos beneficiamos todos como trabajadores. No podemos olvidar que somos, y seguiremos siendo, el principal valor de las organizaciones.
Es muy importante dejar clara esta cuestión, aun a fuerza de ser repetitivo. Si hacemos las cosas mejor y de forma más ordenada, seremos más productivos y eficientes. Este procedimiento resultará positivo para las organizaciones. También lo será para quienes las integramos, ya que nuestra calidad de vida en nuestro tiempo de trabajo será mejor.
Estas son las premisas que han llevado en Adecco Outsourcing a marcarnos un camino claro. Buscamos los mayores estándares de productividad y eficiencia. Para ello aportamos más valor a nuestros clientes. Lo hacemos por medio del modelo de mejora continua como forma de hacer las cosas y tomando como referencia el elemento central de todo ello: las personas.
Con estas palabras simplemente pretendo invitar a la reflexión y a que probemos. Estoy seguro de que, si lo hacemos, podremos ver los beneficios y romperemos con posibles estigmas que existen alrededor de la valía de la mejora continua.
Para finalizar, os dejo una recomendación de lectura: The Toyota Way: 14 Management Principles from the World’s Greatest Manufacturer (Jeffrey K. Liker).
Jose Manuel Tojo, Director de Servicio de Adecco Outsourcing Eurocen