Dicen que los emprendedores no nacen, que se hacen. Pero, viendo la trayectoria y el éxito que han cosechado en los últimos años los proyectos de Marta Esteve, cuesta imaginar que no haya un gen del emprendimiento que ponga más fáciles las cosas y ayude a algunos privilegiados a encontrar esas ideas que funcionan en internet. Sobre todo cuando sabes que decidió ser emprendedora a los 13 años, después de soñar con ser astronauta y gracias al ejemplo de su padre, que tenía su propio negocio.
Ahora esta emprendedora lleva un par de años al frente de SoySuper, una startup que –en sus propias palabras– es “un nuevo tipo de supermercado que permite hacer la lista de la compra y comparar los precios de los principales supermercados online de España”. Su funcionamiento es muy sencillo: el usuario elige un súper de referencia y facilita un código postal para ver qué establecimientos sirven en su zona. Después, hace su lista de la compra y ve cuánto costaría su compra en las distintas cadenas o cuándo se la llevaran a casa, ya que también tiene en cuenta el precio de los gastos de envío.
Parece algo extremadamente obvio que exista una página así, pero nadie había caído en hacer algo parecido hasta 2016. Esteve lo puso en marcha porque echaba en falta mayor agilidad y transparencia en los procesos de compra online, pero también porque vio claro que existía una necesidad relacionada con este negocio. Nadie puso en duda que sabía lo que hacía: Esteve llevaba a sus espaldas dos éxitos empresariales tan importantes como la creación de Top Rural, en el año 2000, y de Rentalia, en 2003.
Sí hubo más escépticos cuando, junto a su marido, Marta decidió dejar su puesto de trabajo en Coca Cola para volver a España y montar una web dedicada al turismo rural. “Mi madre nos decía: pero, ¿de dónde vais a cobrar si lo dais todo gratis? No lo entiendo”, contaba al diario La Opinión de Tenerife hace unos años. Pero, poco a poco, el modelo de negocio fue calando entre los propietarios de establecimientos rurales y los usuarios, y Top Rural empezó a crecer. Lejos de conformarse con este éxito, en 2003 esta emprendedora decidió fundar Rentalia: “Había una necesidad, no solo de turismo rural, sino de casas vacacionales porque no había sitio donde buscarlas fácilmente, con fotos y de forma fiable con gente que contrastasen la existencia de esas casas”.
Ambos negocios coexistieron hasta 2012, cuando finalmente Marta y su marido decidieron venderlos a dos grandes grupos como HomeAway e Idealista. “Es duro desprenderse”, ha comentado en varias ocasiones esta emprendedora de pura cepa que no concibe su vida sin seguir emprendiendo. De hecho, al mes de completar la venta total de Rentalia, ya estaba trabajando en su nueva idea: SoySuper.
