Llevamos ya unas semanas de 2015. Seguramente ya te has planteado aquellos propósitos o retos para el año y probablemente ya has empezado a hacer algunas cosas para conseguirlos. Pero también es posible que pasadas unas semanas más, algunos de esos objetivos caigan en el olvido o te parezcan irrealizables. Para evitar eso, hoy te traemos algunos consejos para marcarte unos objetivos y conseguirlos al final del año.
Anótalos. Aunque tengas muy claros cuáles son tus objetivos en tu mente, escríbelos en un documento que puedas guardar y recuperar durante el año para ir haciendo balance. Anótalos de forma concisa y clara. Además, deben ser objetivos realistas y factibles. Por ejemplo, tu objetivo puede ser aprobar el certificado Advance de inglés.
Marca una estrategia. Se trata de escribir, justo debajo de cada uno de los objetivos, los pasos o acciones que vas a seguir para conseguirlos. Cuanto más específicos sean esos pasos, mejor. Si tomamos el ejemplo anterior de aprobar el Advance, las acciones pueden ser estudiar cuatro horas a la semana, hacer un examen de prueba cada 15 días o ir a clase todas las semanas.
Calendario. Otro de los aspectos más importantes que debemos incorporar al documento de objetivos es cuándo pretendemos conseguirlos. Es decir, debemos establecer un calendario. Debemos marcar la fecha máxima del objetivo completo y también de las acciones concretas que seguiremos para conseguirlos.
Evaluación. El documento de nuestros retos anuales no debe quedarse en un cajón, debe acompañarnos durante el año para asegurarnos que vamos cumpliendo cada paso o acción. En definitiva, se trata de ir evaluando nuestros avances. Además, debemos tener que tener claro que se trata de un documento que puede evolucionar y cambiar. Podemos incorporar nuevos objetivos o modificar la temporización. A pesar de ello, es importante intentar seguirlo al máximo.
