“Madrid es la mejor capital humana de Europa”
Pierre se embarcó rumbo a Madrid con el propósito de poner a prueba su capacidad de competir por un puesto de empleo en pie de igualdad con los hispanohablantes. Con planificación, determinación y esfuerzo logró finalmente acceder a un cargo de Management, y tiempo después ya iniciaba su propia empresa de asesores inmobiliarios para expatriados. Hoy, el parisino nos relata su historia migrante.
¿Cuándo llegaste a Madrid?
Llegué a Madrid en septiembre del 2007, justo cuando estalló fuertemente la crisis y no se podía negar ni esconder ya. Mi objetivo era conseguir un excelente trabajo compitiendo para el empleo en español contra hispanófonos. Quería pasar por los procesos de selección como si fuera un español más. Para mí, esto demostraría que de verdad era trilingüe (francés-inglés-español). ¿Por qué Madrid entonces? Porque conseguí terminar mi carrera en el ICADE, una universidad que te abre muchas puertas para conseguir entrevistas en las mejores empresas de consultoría.
¿Cómo encontraste la ciudad en cuanto a la posibilidad de conseguir trabajo o emprender?
Creo que en Madrid hay una gran demanda de talento internacional. Si además de tener formación de calidad y experiencia relevante en el extranjero, hablas perfectamente inglés y español, podrás conseguir un trabajo de calidad. Eso sí, no es fácil. A mí, me costó 6 meses conseguir un puesto en Management Consulting: tras aceptar una oferta de beca, luego tener un empleo en una consultora pequeña y finalmente, el trabajo. Hay que planificar estos 6 meses por lo menos, ser flexible y saber como posicionarse en el mercado.
¿Tuviste otros empleos antes de decidirte a iniciar tu propia empresa?
El empleo principal que tuve era como consultor. Lo conseguí preparándome de manera profesional, usando mis contactos, entendiendo los mecanismos de selección y diferenciándome fuertemente para llegar a fases finales.
'Madrid es la mejor capital humana de Europa' Léelo hoy en #mimaleta #adeccoblog Share on X¿De que se trata tu iniciativa Moving2Madrid?
En Moving2Madrid, somos ‘personal shoppers inmobiliarios para expatriados’, especializados en Madrid. Ayudamos a que expatriados encuentren la mejor propiedad para comprar o alquilar. Nos encargamos de todo el proceso, desde al análisis inicial, la financiación, los chequeos legales, la negociación, la reforma, etcétera. Hacemos que una persona nueva en Madrid pueda conseguir la mejor propiedad, tal como la haría una persona local. También, damos todos nuestros consejos expertos en nuestro blog como nadie en Madrid, lo que le ha convertido en una referencia y una fuente de información muy útil.
¿Qué fue lo mejor y lo peor de llevar adelante este emprendimiento en un país diferente al tuyo?
Lo mejor fue poder ayudar a tantas personas, también a través de mi ONG Guiripreneur, donde ayudamos a emprendedores extranjeros. Lo peor es olvidar que también hay que vivir, ¡que todo no es solamente trabajar!
¿En qué se diferencia tu vida en Madrid de la que llevabas en París?
Mi vida en Madrid es más asentada que mi vida en París. Al final también soy otra persona, pero aquí dedicamos más tiempo a estar con amigos, a disfrutar de la vida. Madrid es un recordatorio permanente al carpe diem.
¿Qué significa vivir en el extranjero?
Vivir en el extranjero significa crecer y descubrirse. Cuando estás en tu entorno cultural inicial, no eres consciente de tus diferencias, aquello que hace que seas diferente: ¿Qué parte es personal? ¿Qué parte es cultural? También requiere que sepas bien qué quieres hacer de tu vida, ya que hay menos apoyo a tu alrededor (estás lejos de tu familia y amigos de toda la vida) y tienes que construirte una red de apoyo tu mismo, una segunda familia.
¿Recomendarías Madrid como destino?
Sí, recomiendo a Madrid como destino. Para mí, es la mejor capital humana de Europa. Es decir, es capital, con todo lo que necesitas: la diversidad de gente y actividades. Pero a la vez, sigue siendo muy humana, a diferencia de París y Londres, donde mucho de este toque humano se ha perdido. En Madrid siempre siento que puedo empezar a hablar con quien sea sin asustarle. No es así en París.