Uno de cada tres jóvenes querría emprender
Uno de cada tres jóvenes españoles querría abrir su propio negocio. Así lo recoge la II Encuesta Adecco Jóvenes Emprendedores, realizada entre más de 3.000 españoles menores de 30 años. Según el estudio, el 39,3% de los españoles menores de 30 años preferiría trabajar por cuenta propia, ya sea creando su propia empresa (33,1%) o como autónomo (6,2%), frente al 60,7% que escogería tener un empleo por cuenta ajena. Son las mujeres, en mayor medida que los hombres, quienes querrían emprender (51,9% de ellas frente al 48,1% de ellos) igual que son los jóvenes de entre 25 y 30 años los más dispuestos a hacerlo (61,7% frente al 38,6% de los que tienen entre 18 y 24 años).
Las principales razones para emprender son la ilusión de hacer algo propio (67% de respuestas), seguido de la necesidad de tener independencia personal (47%) y porque han detectado una oportunidad empresarial que puede tener éxito (43,7%). Aunque también aparecen otros factores importantes como la libertad de elegir el lugar y el tiempo de trabajo (31,7%) así como la falta de oportunidades atractivas de empleo por cuenta ajena (31,5%).
Problemas de los jóvenes emprendedores
A pesar del elevado índice de emprendedores, el 77% de ellos considera que hoy en día es muy difícil montar una empresa. Tan sólo el 1% cree que es fácil. Un 22% que piensa que es una tarea complicada, pero perfectamente viable. Entre los principales obstáculos que aducen para no emprender están la falta de capital para poner en marcha el negocio (47%), la falta de una idea clara que pueda tener éxito (28,2%), el desconocimiento de los trámites a seguir (14,4%) y los impuestos a pagar (13,7%). Todos coinciden en destacar la necesidad de tener mayores ayudas para favorecer el emprendimiento, así como reducir trámites burocráticos.
La hostelería y la restauración, los negocios relacionados con la enseñanza o los dedicados al ocio y las actividades lúdicas son los que pondrían en marcha la mayoría de potenciales emprendedores, decantándose además más por negocios físicos y no tanto virtuales.
Finalmente, para el 43,7% de los encuestados sería positivo si dentro de 10 años tuviesen un nivel de ingresos suficiente para mantenerse aunque hay un 33,4% al que le gustaría convertirse en un gran empresario con una amplia plantilla de trabajadores a su cargo. El 19,9% de los jóvenes se sentiría satisfecho si pudiese ampliar su negocio y llegar a convertirse en una pyme mientras que un 2,9% vendería su pequeña empresa o proyecto a otra más grande. En cualquier caso, si fracasaran en su primera aventura empresarial, el 72,5% estaría dispuesto a volver a intentar montar su propia empresa.