El emprendedor alicantino Iñaki Berenguer, que actualmente reside en Nueva York, es ingeniero en Telecomunicaciones y doctor por la Universidad de Cambridge y tiene un Master en Administración de Empresas del Instituto Tecnológico de Massachusetts.
Para la mayoría de los emprendedores, pensar en vender en menos de tres años dos empresas parece propio de una película de ciencia ficción; sin embargo, para Iñaki Berenguer no sólo ha sido posible, sino que ha significado tan solo el comienzo de una apuesta por seguir moviendo la rueda de las inversiones y el emprendimiento.
En 2008 creó Pixable, un agregador de fotografías que permite reunir las imágenes de todas las redes sociales de sus usuarios. En 2013 lanzó Contactive, un identificador de llamadas que rastrea y reúne toda la información disponible en internet sobre la persona que realiza la llamada entrante. Ambas empresas tuvieron un gran éxito en el mercado y, en su mejor momento, Iñaki decidió venderlas.
La hazaña lo convirtió en uno de los emprendedores favoritos del mercado y le valió el reconocimiento de toda la comunidad emprendedora. Iñaki reconoce que nada de esto hubiera sido posible sin el apoyo de quienes se animaron a apostar e invertir en sus proyectos, por eso, en la actualidad decide seguir haciendo girar la rueda, invirtiendo ahora él en nuevas start-ups de España y Estados Unidos.
Entre las diversas iniciativas de nuestro país que hoy captan la atención de Iñaki se encuentran: los proyectos de las catalanas Zero 2 Infinity y Tiendeo; Ducksboard, una empresa de software española recientemente adquirida por la norteamericana New Relic; la madrileña Geoblink; y las valencianas PeerTransfer o Celeromics.
Convencido de que los problemas cotidianos pueden resolverse con buenas ideas pero reconociendo que son los que están detrás de ellas quienes realmente pueden garantizar su éxito, Iñaki dice apostar más por las personas antes que por las ideas. Así, este ingeniero de 38 años simboliza hoy el empuje del espíritu emprendedor y nos aporta un buen ejemplo para seguir creyendo en el esfuerzo personal.
