¿Curriculo.doc?
Existen pequeños detalles como el nombre y el formato de tus archivos que deberías tener en cuenta si no quieres que tu candidatura naufrague en un mar de currículos y cartas de presentación anónimos.
No llames a tus archivos simplemente “currículo”, “cv” o “curriculum”. Utiliza siempre una fórmula que incluye tu nombre completo y el del documento que envías, por ejemplo: “LuisAndresPerezCv.pdf”, “BelenGonzalezCartaDePresentacion.pdf”. De esta manera, el empleador reconocerá en pocos segundos tus archivos.
Por otra parte, generalmente te estarás debatiendo si enviar tu Cv en formato PDF o Word. En este sentido, y si bien la mayoría de las empresas suelen contar con el paquete Microsoft Office, es importante considerar algunas cuestiones particulares.
Acrobat Reader es gratuito y Word no. Existen aún muchas empresas pequeñas que no compran el paquete Office y que, en cambio, utilizan software gratuítos como Open Office, por ejemplo. Si tú has grabado tu archivo en Word y el empleador utiliza este tipo de programa para acceder a él, lo que ocurrirá es que todo el trabajo que tú hayas realizado en cuanto a formato (tipo y tamaño de letra, cuadros, diseño, etc.) quedará completamente arruinado. Al cambiar todas estas características del documento, el resultado puede ser caótico y perjudicial, logrando efectos totalmente opuestos a los deseados.
También hay candidatos que piensan que en Word es más sencillo realizar anotaciones y, por ello, podría ser más útil para el reclutador utilizar este formato. Sin embargo, el programa para realizar anotaciones en PDF también es gratuito y cualquiera puede descargarlo.
Por ello, como recomendación final, recuerda nombrar siempre de manera clara tus archivos incluyendo tu nombre y apellido en ellos y utiliza, preferentemente, programas gratuitos como Acrobat (PDF) para que tu trabajo de diseño de texto e imagen quede totalmente intacto al abrir el documento.