Facility manager, una figura clave en tiempos de crisis
Seguramente nunca hayas oído hablar de la profesión de facility manager, ya que en España todavía sigue siendo bastante desconocida. Algunos expertos los comparan con los responsables de los servicios generales de una empresa, pero la labor de estos profesionales va más allá de revisar si se han fundido los plomos cada vez que se va la luz y de asegurarse del buen rendimiento de las calderas.
De hecho, un buen facility manager puede conseguir que la organización para la que trabaja se ahorre una importante suma de dinero al año, puesto que es el encargado de gestionar los recursos inmobiliarios de una compañía. Es decir, que se ocupa, entre otras cosas, de buscar el inmueble más adecuado para ubicar las oficinas o de rediseñar los espacios de trabajo para aprovechar mejor los recursos. También tiene que contratar todos los productos y servicios que se relacionan directamente con el buen funcionamiento de las instalaciones, como la contratación de la luz, el mantenimiento de las oficinas, el consumo de papel de las impresoras, la seguridad, etc.
“Y todo con una gestión lo más óptima posible que permita reducir costes y ahorrar dinero a la compañía”, explica el responsable de comunicación de la Asociación Española de Facility Management (IFMA), Redondo López, en una entrevista a ‘El Confidencial’. “Además de todo lo anterior, es el encargado de definir espacios de trabajo agradables y cómodos, lo que a la larga se traduce en mayor productividad por parte de los empleados, entre quienes también debe crear imagen o sentimiento de marca. Si el facility manager realiza bien su trabajo, puede ahorrar mucho dinero a la compañía”, añade.
Su labor, por tanto, es clave dentro de cualquier empresa porque, según los datos que maneja IFMA, el facility management es la segunda partida de gastos más importante dentro de una empresa. En general, esta actividad supone el 30% de los gastos de una empresa. Y, según Redondo, el buen saber hacer del facility manager puede conseguir reducir esta factura entre un 20% y un 30%, generando un impacto positivo en la cuenta de resultados de una compañía entre un 6% y un 9%.
Dadas estas cifras, todo parece indicar que la figura del facility manager cobrará un gran protagonismo en los próximos años, cuando cualquier empresa de más de 100 empleados deberá plantearse la contratación de un profesional con este perfil si quiere mantener a raya sus gastos.