“Este es un país de oportunidades”
Inma dejó Barcelona hace 18 años para probar suerte en Londres como diseñadora textil. Gracias a su talento, a que nunca ha perdido la confianza en sí misma y a su esfuerzo, hoy tiene su propia empresa, Qatch My Travel Toy, con su propia línea de productos. Según ella, “si eres bueno en algo, vengas de donde vengas, siempre valorarán tu trabajo”.
¿Por qué viniste a Londres?
Decidí venir a Londres hace 18 años para estudiar inglés y poder buscar trabajo en lo mío después de mi gran fracaso al suspender un test de inglés al que me presenté en Madrid para acceder a una beca en EE.UU.
Mi primera idea era irme Nueva York con una beca artística para estudiar un año en la School of Visual Arts, mi proyecto fue aprobado pero mi nivel de inglés no estaba a la altura y después de perder esa gran oportunidad decidí venirme a Londres para aprender el idioma, poder acceder a un espectro más amplio de trabajo y así poder evolucionar profesionalmente. En Barcelona tenía trabajo como diseñadora, pero por aquel entonces no estaba muy bien pagado y yo tampoco veía mucha salida.
¿Cómo ha sido tu evolución profesional a lo largo de estos años hasta acabar creando tu propia empresa?
La verdad es que siempre pienso que fui una privilegiada y mi caso es bastante único porque trabajaba para mi agente en Barcelona desde casa en Londres mientras iba a clases de inglés. Enviaba mis diseños cada cierto tiempo y él viajaba vendiendo mi colección, así pude mantenerme el primer año. Después de un año decidí que quería seguir en Londres y busqué agentes que vendiesen mi colección en ferias dedicadas al sector textil, así que visité un par de ferias en Londres y ofrecí mi currículum a los agentes que me parecían más apropiados y que encajaban más con mi estilo y la verdad es que me recibían con las puertas abiertas. La transición no fue fácil, pero valió la pena y sobreviví. Después de adquirir más experiencia decidí tomar las riendas y comencé a viajar al norte de Inglaterra y a ferias del sector textil en Bruselas, Frankfurt y Nueva York para vender mi colección y exponer mi trabajo para vender y hacer nuevos clientes. La experiencia ganada fue inestimable y aprendí que si eres bueno en algo, vengas de donde vengas, siempre valorarán tu trabajo. Aquí el gobierno ofrece muchas más facilidades que en España para fundar una empresa. Desde entonces mis diseños han sido producidos por compañías reconocidas mundialmente y con tiendas en muchos países del globo, ¡qué más puedo pedir!
¿Qué es lo mejor de la experiencia de vivir en Reino Unido?
Aquí se valora y respeta tu trabajo y habilidad profesional vengas de donde vengas, pero siempre y cuando hables el idioma. Este es un país de oportunidades donde siempre te valorarán por lo que haces y el ambiente laboral es muy profesional.
¿Y lo más difícil?
Para mí lo más difícil fue acostumbrarme a los fríos inviernos. Dejar atrás a la familia y amigos, el sol y el mar en Barcelona fue bastante duro, pero me adapté y aún así con los años y un buen abrigo hasta eso ahora me parece una nimiedad.
¿Cómo describirías a la gente y sus costumbres?
La verdad es que Londres es una ciudad muy cosmopolita y muchos nativos del lugar prefieren reubicarse hacia las afueras y pueblos lindantes con Londres. Los ingleses son reservados, pero muy amables y creo que su reserva tiene mucho que ver con el clima del país.
Aquí la mezcla étnica es muy rica y aprendes a familiarizarte y enriquecerte con otras culturas y costumbres y, sobre todo, a ser más tolerante con la gente.
¿Qué le recomendarías a alguien que quisiera probar suerte allí?
Si quieres probar suerte en Londres, o en cualquier lugar del mundo, lo más importante es que puedas comunicarte y que aprendas el idioma del país elegido. Si estás preparado profesionalmente, eso es lo que te abrirá todas las puertas y a todos los niveles, y hoy en día con las redes sociales que existen es incluso más fácil.