Son muy pocos quienes pueden tomar la decisión de iniciarse en este nuevo universo emprendedor sin necesidad de asociarse con alguien más. Por ello la búsqueda de esa otra persona con quien animarse a la aventura del emprendimiento resulta tan importante. Pero, ¿cómo elegir al socio perfecto?
Si bien no hay una receta única, hay al menos 4 pruebas que podrían ayudarte a saber si estás errando en la elección o estás escogiendo al socio perfecto:
- Prueba de los valores compartidos: Observa los principios y valores que movilizan a tu compañero en su vida personal y profesional, ¿se parecen a los tuyos? Esto es fundamental para intuir si podréis construir una sociedad animada por una misma ética de trabajo. Resultaría muy problemático descubrir una vez que la empresa esté en funcionamiento que a tu socio no le preocupa cumplir con los compromisos o descuidar aspectos de la compañía que para ti son importantes. Acordad desde el comienzo cuál será la filosofía y la ética que os animará en vuestro trabajo.
- Prueba de las habilidades complementarias: Los valores similares os harán grandes compañeros pero las habilidades complementarias os harán excelentes socios. Imagina que ambos sois buenos en las mismas actividades y que os gusta hacer exactamente lo mismo… ¿quién se hará cargo del resto de las tareas? Es importante tener en cuenta que en una organización existen gran cantidad de actividades que os tendréis que repartir y que ambos deberéis estar conformes con las tareas asignadas y saber desempeñarlas con habilidad. Poneros de acuerdo en el modo en que gestionaréis vuestro proyecto lo antes posible.
- Prueba del viaje: Realizar un viaje junto a tu potencial socio de trabajo te permitirá conocerle rápidamente. Observa si os resulta sencillo poneros de acuerdo o si en cambio os cuesta mucho esfuerzo coincidir. Presta especial atención al modo en que resolvéis los pequeños desacuerdos cotidianos. Una prueba full-time te ayudará a encontrar rápidamente las similitudes y diferencias entre vosotros.
- Prueba ‘química’: ¿Cómo te entenderás con tu socio? Para ponerlo a prueba, nada mejor que compartir tiempo juntos, trabajando en vuestro proyecto y planificando. Una primera prueba piloto que os dará algunas pautas concretas de la dinámica de trabajo. Pero también hay que probar la química de vuestras personalidades… compartid también algún tiempo de ocio y relax juntos, conversando sobre vuestros proyectos personales y conociéndoos mutuamente.
Anímate a poner a prueba la relación con tu potencial compañero de emprendimiento y descubre si será tu socio ideal!
