¿No te gustan los lunes? ¿Te cuesta levantarte más de lo normal y no te pones en marcha hasta que ya te has tomado dos cafés y hace cinco horas que te has levantado? ¿Te notas de peor humor que el resto de la semana? Los lunes no tienen porque ser así. Puedes empezar la semana con buen pie. Hoy, en Adeccorientaempleo te traemos algunos consejos para hacer más llevadero el primer día de la semana.
Levántate antes. Avanza el despertador media hora y ponte en pie antes de lo habitual. Arréglate con calma y desayuna bien (esto último lo deberías hacer todos los días de la semana). No empieces la semana con el estrés de estar mirando el reloj a todo momento. Que la mañana del lunes sea tranquila y pausada.
Arréglate. Sentirnos bien físicamente también ayudará a que tengamos un mejor día. Haz un esfuerzo, sobre todo los lunes, para arreglarte y llevar una ropa con la que te sientas bien. Crecerá tu confianza.
Llega antes al trabajo. La primera hora del día hay menos actividad en las empresas. No suena el teléfono y el ambiente está más tranquilo. Sentirás más paz. Aprovecha ese tiempo para organizar la agenda de la semana, ser consciente de que deberás hacer, ponerte al día con tu correo y ser consciente que el lunes va a ser un buen día.
Piensa en la actividad del fin de semana. Aprovecha la hora del café o de la comida para hablar con tus compañeros sobre lo que habéis hecho el fin de semana. Compartir unas risas con ellos hará que no veas tan duro la vuelta al trabajo después del descanso semanal.
Escucha música que te active y te ponga de buen humor. Una buena manera de mantener una actitud positiva es escuchando canciones que te hagan sentir bien. Sea de camino al trabajo, mientras estés trabajando o cuando te tomes un descanso, escucha alguna canción que te haga sentir bien.
Programa una actividad que te guste. ¿Eres de los que el lunes se les hace eterno? Porque no te programas una actividad que realmente te guste para después del trabajo. Puede ser desde hacer deporte hasta tomar una copa con tus amigos. Será como un premio al esfuerzo del día y pensar en esa actividad durante la jornada te pondrá de buen humor.
Sé agradecido. Es el último consejo, pero no por ello menos importante. Múestrate agradecido por lo que tienes y busca lo positivo de tu trabajo.
