¿Eres barro o eres oro?
¿Eres barro o eres oro?
“…La estatua del buda de barro, alcanzaba casi tres metros de altura; durante generaciones había sido considerada sagrada, por los habitantes del lugar.
Un día, debido al crecimiento de la ciudad, decidieron trasladarla desde el monasterio, a un sitio más apropiado.
Esta tarea le fue encomendada a un reconocido monje, quien después de planificar concienzudamente su delicada tarea, comenzó su misión; con tan mala fortuna, que al moverla al exterior, ésta se cayó al suelo, agrietándose en varias partes.
Compungidos, el monje y su equipo, decidieron pasar la noche meditando qué hacer y valorando las posibles alternativas, fueron unas largas y… lluviosas horas.
A la mañana siguiente, observaron como salía luz de entre algunas de las grietas del buda, una luz dorada y brillante; se acercaron y con un martillo comenzaron a golpear y descubrieron… ¡un buda de oro macizo de más de tres metros de altura!”…
Muchos años atrás, cuando el pueblo iba a ser atacado por bandidos, los pobladores para protegerlo, lo cubrieron de barro, así tras los saqueos, el buda era sistemáticamente ignorado.
Después, se pensó que mejor seguir ocultándolo; con el tiempo y generación tras generación, se creyó que el buda de oro, era solo una leyenda y finalmente cayó en el olvido.
Nosotros somos como el buda de barro, que día a día, para protegernos, hemos ido cubriéndonos de barro, pero no os olvidéis, de que dentro de cada uno de vosotros… debajo de ese barro ¡sois todos de oro macizo!
Todos tenemos dentro, todos los talentos y todas las capacidades que necesitamos para ser felices y depende de nosotros, que asumamos nuestra responsabilidad para serlo, que tomemos las riendas para conseguir nuestros sueños.
1. Seré capaz de ir rompiendo poco a poco, ese barro que me cubre, si tomo conciencia del nivel de satisfacción, en todas las áreas de mi vida, ¿cómo de feliz soy hoy, en el área de la salud, familia, ocio, trabajo? ¿Cuál es mi estado actual?
Y si tomo conciencia de ¿cuál es mi estado deseado?, definiendo ¿qué quiero?; si sé lo que quiero, puedo elaborar un plan para conseguirlo, buscando los medios, organizando mi tiempo para conseguir mi objetivo, con esfuerzo y sobre todo con acción.
2. Para quitarme el barro, es necesario que me auto-acepte y para ello es fundamental superar mis creencias limitantes y conseguir que mis valores “quien soy”, esté alineado con mis conductas “lo que hago”.
3. Se me caerá otra capa de barro, para poder mostrar el oro macizo del que estoy compuesta en realidad, si me auto-respeto, “observando” mi lenguaje interior, ¿lo que me digo me potencia o me limita? y manteniendo mis compromisos conmigo mismo y con los demás. ¿Cuándo me digo, “el lunes empiezo el gimnasio”, ¿lo hago? ¿Mantengo mi palabra conmigo mismo? ¿me respeto?
4. Sabré que es el momento de dar con el martillo y quitarme el barro más deprisa, si soy capaz de escuchar el feedback, aquel que me da mi propio organismo ( interno), con dolores y molestias y el que me dan las personas que me rodean (externo).
5. Iré viendo poco a poco mi propio brillo interior, si supero mi pasado, si no me quedo estancado, no importa lo que no haya conseguido antes, ¡ahora es el momento!, ahora debemos apostar por nosotros mismos y por nuestra grandeza, cambiando nuestra actitud negativa ante la vida, cambiando nuestras conductas inefectivas y creando nuevos y saludables hábitos.
6. Estaré sin barro completamente y brillando, si soy capaz de identificar mis emociones, ponerlas nombre cuando aparecen, miedo, enfado, alegría, tristeza… y gestionándolas a mi favor; eliminando sentimientos nocivos, como el victimismo, resentimiento, culpabilidad…
7. Asume que tú eres el único responsable de tu vida, ¡asume que eres de oro!, auto motívate y actúa.
Recuerda, ser la mejor versión de ti mismo, con ilusión, márcate tu sueño, tu meta, límpiate el barro, trabajando sobre tus creencias limitantes ( no puedo, no valgo), aceptándote y respetándote, gestionando tus emociones y sentimientos nocivos, escuchando constantemente el feedback, para poder ir haciendo ajustes, de manera flexible en tus nuevas acciones, para conseguir tus sueños.
¿Eres barro o eres oro?