Las energías renovables están de enhorabuena y empiezan a sumar seguidores a gran escala. En junio celebrábamos que el avión “Solar Impulse 2” había aterrizado en Sevilla, completando el primer vuelo transatlántico realizando íntegramente con energía solar. Y tan solo un mes después, sus pilotos ya habían logrado completar una histórica vuelta al mundo en 505 días y 17 vuelos.
Gracias a la energía solar, el avión fue capaz de ir cubriendo exitosamente cada una de las etapas de su travesía, pasando por Omán, India, Myanmar, China, Japón, Estados Unidos, España -Sevilla fue su única parada en Europa- y Egipto.
Como es natural por su desarrollo reciente y el uso exclusivo de energías renovables, esta aeronave es más lenta que las convencionales y para lograr generar la energía suficiente para volar, sus enormes alas de 72 metros están cubiertas de 269,5 metros cuadrados de células fotovoltaicas.
Bertrand Piccard y André Borschberg son los dos pilotos, fundadores del emprendimiento, que completaron esta primera circunnavegación del globo sin combustible. Su avión solar se convirtió en un verdadero laboratorio volador, repleto de tecnologías limpias, con el que consiguieron volar 40.000 km para promover el uso de las energías renovables y la eficiencia energética, en busca de una mejor calidad de vida para todos.
Bertrand Piccard, médico especialista en psiquiatría, explorador y aeronauta, declaró: “Si los gobiernos tuvieran el valor de promover tecnologías limpias a gran escala, nuestra sociedad podría reducir simultáneamente su dependencia de los combustibles fósiles, crear empleos y estimular el crecimiento sostenible”.
Asimismo, el cofundador del emprendimiento, ingeniero y piloto profesional, André Borschberg, explicó: “Construir equipos es, a la vez, un arte y una ciencia. El valor del talento se crea a través de diferencias, no de similitudes”.
Dos valientes embajadores de las energías renovables que ahora siguen apostando por más. Su último reto: los drones solares, una nueva aplicación de estas energías respetuosa del medio ambiente que intentarán ser una versión sin piloto de “Solar Impulse 2”.
