Consejos para evaluar una oferta de trabajo
Realizar una evaluación de una oferta laboral puede ser abrumador. Claro, es emocionante ser el elegido, y es posible que te preocupe que, si no dices que sí de inmediato, todo se desvanecerá. Pero no permita que esa emoción embriagadora te lleve a tomar una decisión precipitada. Aprender a evaluar una oferta de trabajo requiere tiempo y una cuidadosa consideración.
No querrás terminar aceptando un empleo que sonaba increíble solo para encontrarte trabajando en un cubículo diminuto durante 10 horas al día, con un sueldo terrible y compañeros de trabajo que no se ríen de tus bromas.
Toma un respiro. Considera la imagen completa. Haz una lista de lo que realmente necesitas y quieres de tu próximo trabajo. Las cosas que debemos tener y las cosas que sería bueno tener son muy personales y cambian a medida que cambian nuestras necesidades.
<< Conoce ahora todas las empresas en las que puedes trabajar con Adecco >>
Consejos para tomar decisiones de empleo
Visualiza tu vida (y el saldo de tu cuenta bancaria) dentro de seis meses. Si se mejora considerablemente, este trabajo podría encajar perfectamente. Si no es así, es posible que debas seguir buscando. Utiliza esta lista de verificación de tres partes para la evaluación de una oferta laboral.
Comienza con el dinero
El salario es probablemente tu consideración número uno cuando se trata de determinar si una oferta de trabajo es ideal. Una vez que te ofrezcan un sueldo, verifica dos veces tu presupuesto para asegurarte de que realmente sea suficiente.
Esto es especialmente importante si el trabajo requiere una mudanza o un cambio importante en tus traslados. ¿Tus viajes serán más largos? ¿Esto requerirá más gasolina o tomar un tren o un autobús? ¿Cuánto costará?
Después de calcular esos gastos, asegúrate de tener suficiente dinero para contribuir a cuestiones como tu fondo de pensiones o tu cuenta de ahorros, incluso si es una cantidad relativamente pequeña.
Otros aspectos financieros a considerar al evaluar una oferta de trabajo:
- Bonos. ¿Hay un bono de inicio de sesión? ¿Existe la oportunidad de ganar bonos basados en el desempeño?
- Seguro de salud y prestaciones de bienestar. Analiza las ventajas que te ofrecen con un seguro de salud privado, sesiones de fisioterapia o asistencia a gimnasio.
- Jubilación. Ten en cuenta tus aportes, las coincidencias del empleador, los períodos de eliminación, los calendarios de adquisición de derechos y los ahorros antes de impuestos.
- Reparto de utilidades u opciones sobre acciones. Solicite detalles y plazos, si esto es parte de tu plan de compensación.
- Asistencia de reubicación. Si tiene que mudarte para este trabajo, ¿la empresa pagará todos o parte de tus gastos?
- Reembolso de guardería o cuidado de niños. ¿Hay guardería en el lugar o un subsidio para el cuidado de niños?
- Beneficios complementarios. Los beneficios complementarios o voluntarios son cosas como el seguro contra el cáncer, el seguro de vida, la protección contra el robo de identidad o los servicios legales. Algunas empresas también ofrecen otros incentivos, como pases de autobús gratuitos.
Estas ofrendas pueden endulzar tu contrato, o pueden no importarte. Si vives en una ciudad como Madrid o Barcelona, piensa en los beneficios de estacionamiento y tránsito como dinero en efectivo que ahorras o gastas de tu nómina. Por el contrario, los beneficios que no necesitas (como un seguro legal o para mascotas) no agregan ningún valor a la oferta de trabajo.
Piensa en la cultura de la empresa
Vas a pasar mucho tiempo en este nuevo trabajo. Sí, es importante que pagues tus facturas, pero también querrás sentir que encajas. Aquí hay algunas cosas que debes considerar.
- Ambiente de trabajo Pide hacer un recorrido, incluido dónde te sentarías. ¿Te ves trabajando en ese espacio? Si es una sala grande con cubículos, ¿hay algún lugar para hacer llamadas privadas en su descanso o almuerzo? ¿Los otros empleados parecen felices o abrumados? ¿Hay luz natural? ¿Cuál es el código de vestimenta? Incluso un recorrido virtual puede revelar mucho sobre la cultura corporativa.
- Desarrollo profesional. Infórmate sobre oportunidades de ascenso, obtención de certificaciones y capacitación de desarrollo adicional.
Ten en cuenta tus necesidades
Así como la cultura en la oficina es importante, también lo es el equilibrio que logra tu trabajo con el resto de tu vida. Al evaluar una oferta de trabajo, pregúntate si podrás pasar todo el tiempo que desees con tu familia. ¿Podrás viajar por diversión o estarás tan cansado de viajar por trabajo que ni siquiera querrás hacerlo?
Cualquiera que sea tu paquete final, requiérelo todo por escrito. El acuerdo de apretón de manos que hiciste con este jefe puede no cumplirse si él o ella deja la organización y llega otro nuevo. Esto es lo que debes considerar:
- Requisitos de viaje. ¿Cuánto tiempo de viaje se requiere de ti? ¿Qué gastos relacionados con el viaje se reembolsarán? ¿Tendrás que organizar el cuidado de niños o un cuidador de mascotas cuando estés fuera de la ciudad?
- Tiempo libre pagado, vacaciones, días personales o por enfermedad, licencia familiar. Infórmate por adelantado sobre las políticas de tiempo libre. Pregunta acerca de las fechas restringidas de vacaciones, las políticas de licencia personal extendida y cosas por el estilo.
- Trabajo remoto. ¿La empresa te permitirá trabajar desde casa a veces? ¿Todo el tiempo?
- Flexibilidad de horarios. Puede ser difícil negociar más flexibilidad una vez que hayas comenzado, así que hazlo ahora. También puedes consultar la página de carreras de la empresa y los perfiles de las redes sociales para ver si mencionan arreglos de trabajo flexibles.
Por último, debes tener en cuenta que evaluar una oferta de trabajo no es algo para apresurarse, especialmente porque pasarás mucho tiempo en ese empleo. Tu carrera te brindará muchas opciones, por lo que es una buena idea prepararse para algunas curvas y anticiparse todo lo posible.