Saca partido de tus experiencias vitales
A lo largo de nuestra vida, son muchas las experiencias y logros que nos ayudan a aprender. Más allá de la formación formal y de las experiencias laborales, hay un gran número de sucesos y actividades cotidianas que nos ayudan a tener un conjunto de conocimientos prácticos, relacionales y de otro tipo. ¿Por qué no sacar el máximo provecho a estas experiencias y conocimientos aplicándolos en nuestro día a día laboral?
Son muchas las personas que cada semana practican algún deporte de equipo o se entrenan para algún torneo o competición. Personas anónimas que dedican sus esfuerzos a mejorar su salud y su cuerpo mientras disfrutan del deporte. La superación, la resistencia, la victoria y la derrota son estados y momentos que experimentan. El valor de cada uno de ellos reside en la marca, el recuerdo que dejan en la mente. Para aprovechar todo este tipo de experiencias y conocimientos en el trabajo, se debe entender la entrevista de trabajo o la reunión con los compañeros como un acontecimiento vital más que requiere esfuerzo, sacrificio y gracia para asumir tanto la victoria como la derrota. Así, cada aprendizaje conseguido en el campo de fútbol o el gimnasio es un aprendizaje aplicable al mundo laboral, en general, y a los retos que en este se plantean, en concreto.
Además del deporte, muchas personas dedican su tiempo libre a realizar actividades artísticas tales como el teatro, la danza, el patchwork y otras. Cada una de estas actividades permite conectar de forma muy directa la creatividad de uno mismo con la creatividad de otros. Por ello, estas actividades, que facilitan la relajación y ayudan a la comprensión mutua, son útiles más allá de si mismas. Los valores y el aprendizaje adquirido practicando una obra de teatro o bailando con un grupo de amigos tienen una utilidad global y, por ello, debemos aprovecharlos en nuestro trabajo. Seguramente, si empezamos a relacionar conocimientos del mundo artístico y del laboral, veremos como nuestra empatía con respecto a los compañeros aumenta y, a la vez, notaremos que en las actividades culturales mostraremos más diligencia y entrega.
Además del deporte y el arte, son muchas las esferas sociales de las que podemos extraer reflexiones útiles para el mundo laboral. El asociacionismo o el voluntariado, por ejemplo, también son posibilidades que nos ayudarán a aprender mucho sobre los demás y sobre nosotros mismos. Solamente es necesario reflexionar sobre el aprendizaje y pensar en cómo utilizar aquello que sabemos en todas las esferas donde tenemos un papel relevante.