En todos los ámbitos laborales encontrarás compañeros conflictivos con los que te será difícil relacionarte. El abanico de posibilidades para enfrentar estas situaciones es muy variado y dependerá del vínculo o grado de relación que te una a la otra persona.
En primer lugar, si el conflicto es contigo es importante que tengas en cuenta que para que éste exista son necesarias dos personas. Es decir, no se librará batalla si tú no tomas parte en ella. Por este motivo es importante que te abstengas de fomentar el choque, incluso si la otra persona es la que ha iniciado el enfrentamiento.
No le atribuyas a tu compañero más poder del que realmente tiene. No es la otra persona la que te hace sentir mal o inseguro. Esas cuestiones ya están en ti y es este compañero en particular quien las aprovecha para generar el conflicto. Nunca pierdas el respeto hacia él. Separa tus sentimientos del problema real y céntrate en resolver este último. Mantén informado a tu superior siempre que consideres que el conflicto puede obstaculizar tu trabajo.
Por otra parte, si el problema respecto a estos compañeros conflictivos no es directamente contigo pero te molesta el modo de comportarse de tu compañero, puedes intentar minimizar los momentos de encuentro con él y así evitar posibles conflictos. No es lo mismo compartir una máquina de fotocopias que almorzar juntos cada día.
Si esto no es posible, puedes intentar revertir la situación generando un vínculo distinto con él. Busca temas neutrales que puedan actuar de puente entre vosotros y ser un punto de acercamiento. Preocúpate por conocerlo un poco más y probablemente descubras más de tema en común sobre el que poder hablar sin entrar en conflictos.
En cualquier caso, siempre actúa antes de que las cosas empeoren e informa a tu superior, pero asegúrate de hacerlo sobre la base de pruebas y argumentos reales. No comprometas tu trabajo y el de tu compañero simplemente porque la presencia de la otra persona te incomoda.
Suele ser habitual tener que compartir nuestro lugar de trabajo con algunos compañeros difíciles. En la mayoría de los casos, los problemas que se generan no son importantes y un pequeño cambio de actitud de parte nuestra poder revertirlos. No te dejes llevar por los sentimientos negativos o los comentarios del entorno. En ti está la clave para controlar tus relaciones.
