Cinco errores a evitar en las redes

Publicación
16 de octubre de 2013
Lectura: 3 minutos
Imagen. Errores a evitar en las redes sociales Adeccorientaempleo

Hemos hablado muchas veces sobre la importancia de tener una presencia online y de utilizar todos tus contactos durante la búsqueda de empleo. Pero, las redes sociales no son mágicas ni harán nada  por ellas mismas, por eso es fundamental que aprendas a moverte en ellas utilizando su propia lógica: la de compartir.

Debes saber que no todo lo que hagas en redes sociales te facilitará conseguir en empleo, muchas veces un uso inapropiado puede incluso ponértelo más difícil. Entonces ¿qué es lo importante? Entender el funcionamiento de las redes y aprovecharlo. Aquí te dejamos cinco ejemplos de errores que no te permiten sacar provecho de todos los recursos de las redes sociales:

  1. Olvidar “dar”: las redes se basan en la lógica del “intercambio”, es decir: “dar y recibir”. Sin embargo, muchos olvidan la primer  parte y convierten su presencia online en una continua  búsqueda de ayuda. Como en la vida real, aquí es importante ser agradecido y la forma de serlo es devolviendo los favores y las ayudas. ¿Sabes si tú podrías contactar a otros u ofrecerles un servicio y brindarles tus conocimientos? Siempre habrá algo que tú tienes o que puedes hacer y que otras personas necesitarán. Las redes se basan en ese intercambio. ¡Tenlo presente!
  2. No dar “calidad” a las relaciones: una de las mayores ventajas de estar conectado es tener vínculos de calidad. En la vida real tu puedes tener muchos contactos, pero los buenos amigos serán muy pocos. Con las redes sucede algo similar: puedes tener cientos o miles de personas en tu red, pero debes cuidar la calidad de los vínculos, especialmente, con aquellas personas con quienes por uno u otro motivo tienes mayor afinidad y con quienes el intercambio es más productivo. Céntrate en cultivar estas relaciones, compartir temas de interés, colaborar y tenerlas en cuenta. Ellas serán el núcleo duro de tu red y tu mayor valor.
  3. No tener constancia o ser inactivo: todo lo que venimos hablando hasta aquí es imposible de realizar si sólo utilizas la red una vez al mes. Es importante tener tu perfil actualizado y ser un eslabón dinámico. Si lo piensas, el único motivo por el cual el networking funciona es porque cada uno de los contactos agrega un valor añadido y dinamiza el sistema. La red es un organismo vivo y su vitalidad depende de la energía y de la acción de sus partes.
  4. Descuidar los vínculos: si te has reunido con algún contacto y ha sido un encuentro provechoso, no puedes simplemente dejarlo y esperar a que él se acuerde de ti. Debes dar continuidad a esa relación, hacerle saber que le agradeces su tiempo y que estás interesado en seguir en comunicación. Si no realizas este sencillo seguimiento, tal vez pierdas un contacto de especial valor para tu carrera o tus intereses. Es importante que tu nombre no sea para él algo pasajero que al día siguiente se le olvide. ¡Ocúpate de demostrar interés!
  5. Esperar que la red haga todo por ti: las bondades de la red son inmensas y un buen uso de ella podrá hacer tu vida mucho más sencilla. Pero debes intentar trasladar a la vida real los vínculos que generes allí. Invita a ese contacto a tomar un café para saber más de él, contarle de ti, ver qué tenéis en común y de qué manera podéis colaborar el uno con el otro. La relación cara a cara le dará otro valor al vínculo y te permitirá abrir nuevas puertas. Recuerda que la red debe complementar el resto de tus acciones!

La lógica del networking se sustenta en el intercambio, el valor, la calidad y, sobre todo, la acción personal que se traduce a la vida real. Entender cómo funcionan las redes y hacer un buen uso de ellas te abrirá un mundo de posibilidades.

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