Cuándo el dinero no abunda, ¿qué mejor idea que invertir en tiempo? Un bien limitado y preciado, pero a disposición de todos. Esa es la idea sobre la que se basan los Bancos de tiempo, iniciativas grupales en donde la finalidad principal es el intercambio de servicios o bienes entre los vecinos de un barrio.
El banco del tiempo, como señala uno de sus vídeos promocionales, no tiene dueños porque no es un banco comercial y funciona cuando los vecinos intercambian servicios y capacidades que se valoran de acuerdo al tiempo requerido para realizarlos. Así, alguien que ofrece dos horas de clases de inglés se hará acreedor a dos créditos de tiempo que podrá utilizar, por ejemplo, para obtener dos horas de trabajo de un lampista en su domicilio.
La cantidad de servicios y bienes que se pueden ofrecer es incalculable y para toda transacción el banco es sólo un intermediario que garantiza la seguridad y fiabilidad. La Asociación para el desarrollo de los Bancos de Tiempo (ADBdT) ya tiene contabilizados más de 300 emprendimientos en toda España y ofrece en su página web la posibilidad de localizar el más cercano a tu domicilio.
Los bancos de tiempo además de ser una original iniciativa que ayuda a sortear los problemas económicos, ofrecen la posibilidad de conocer a los vecinos de tu barrio, capacitarte, hacer valer tu tiempo y colaborar en la creación de una comunidad más unida y solidaria.
Un creativo spot promocional del Banco del Tiempo de Bilbao nos cuenta más sobre estos emprendimientos. Puedes verlo haciendo clic aquí.
