“Australia quiere profesionales cualificados”
Después de su primera visita a Australia, el diseñador gráfico Daniel Salom, nacido en Mataró (Barcelona), supo que volvería para tener una verdadera experiencia de vida allí. Hoy en día reside en Melbourne y es Senior UX/UI Designer en realestate.com.au, el portal inmobiliario número uno en Australia. Daniel recomienda a todo el mundo visitar este país, aunque nos advierte sobre las dificultades para obtener empleo y un visado de trabajo.
¿Hace cuánto tiempo y por qué vives en Melbourne?
Emigré a Australia hace cerca de 3 años, pero al contrario de lo que muchos podrían pensar no emigré por la crisis. La primera vez que visité el país fue en 2003 para tomarme un respiro aprendiendo inglés y tener la experiencia de vivir en el extranjero. Desde siempre había tenido curiosidad por conocer este rincón del mundo. Al regresar a Barcelona tuve claro que en algún momento intentaría conseguir un visado de trabajo para volver a Australia; pero si algo aprendí es que necesitaría adquirir mucha experiencia profesional antes de hacer ningún paso. Aquí se valora mucho.
¿Ya tenías trabajo antes de llegar o lo conseguiste allí?
Conseguí venir con un trabajo debajo del brazo. No fue nada fácil, pero por suerte mi profesión me permite mostrar mis habilidades sin necesidad de asistir presencialmente a una entrevista. A los diseñadores siempre se nos requiere presentar un portfolio de trabajos en formato digital y en cuanto a entrevistas, es muy habitual hacerlas vía Skype, ya que Internet es nuestro medio. Conseguir el visado no fue nada fácil, tuve que contratar un agente migratorio y necesité prácticamente dos años para encontrar mi camino.
¿Cómo describirías la gente y la cultura del lugar?
Australia es un país hecho de inmigrantes y sigo fascinado por el gran nivel de tolerancia y entendimiento que hay entre las culturas. No tiene una gastronomía propia que destaque mucho; si algo han sabido hacer es abrirse a la gastronomía de otros países. En la actualidad es muy fácil comer cada día comida de un país distinto. La gente que he conocido en general tiende a ser muy amable y es muy sencillo establecer una conversación, ya que la gran mayoría tenemos raíces fuera de un modo u otro. Los australianos nacidos aquí si algo adoran es la cerveza, las barbacoas y pasarlo bien con los amigos
¿Cómo ha sido tu adaptación?
Al llegar a Australia lo hice en Adelaide. Viví allí durante 11 meses y los primeros fueron bastante duros: estás en una nueva ciudad, nuevo idioma, no conoces a nadie… pero con paciencia y buena voluntad las cosas se fueron encarrilando. Lo más difícil fue probablemente comprender cómo funciona el mercado de alquileres o cuando compartes vivienda; pero una vez entendido, te das cuenta que al fin y al cabo las leyes están hechas para proteger a ambas partes. Mudarme a Melbourne fue otro gran paso que requirió poner todo mi empeño en empezar de nuevo; pero mereció la pena, ya que Adelaide se me quedó pequeño muy pronto.
¿Qué ha sido lo mejor y lo peor de tu experiencia hasta ahora?
Lo mejor es sin duda el estilo de vida que ahora tengo. Puedo quedar cualquier día después del trabajo con compañeros o amigos, ir a cenar, al gimnasio… no tengo que esperar al fin de semana para hacer cosas, ya que aquí a las las cinco y media de la tarde terminamos la jornada. Antes no tenía tiempo para mí y eso me llevó a hábitos poco saludables. Lo peor es posiblemente el hecho de que sólo puedo ir a Barcelona una vez al año a ver la familia y que está a 20 horas de vuelo. Pero esto es algo que poco a poco he aprendido a sobrellevar.
¿Recomendarías la ciudad en la que resides como sitio para ir a vivir y buscar empleo?
Definitivamente recomiendo a todo el mundo venir a Melbourne y descubrir esta magnífica ciudad. Lo que no recomiendo de ninguna manera es venir a lo loco y pensar que te van a ofrecer un trabajo para quedarte. He conocido varias personas que vinieron con esa intención y se han tenido que volver a casa con los bolsillos vacíos. Melbourne es una ciudad cara. Si alguien quiere venir aquí a trabajar, mi sugerencia es que busque un agente migratorio y se asesore para que estudie su caso particular y le diga si tiene opciones de conseguir un visado de trabajo. Australia quiere profesionales cualificados. En lo que respecta a restauración hay cientos de miles de estudiantes dispuestos a hacer esos trabajos.