Ya estamos en verano. Suben las temperaturas y la actividad se ralentiza. Si estás estudiando, pronto se te abrirán (si no lo han hecho ya) las puertas de dos meses de vacaciones. Podrás descansar, disfrutar de la naturaleza, leer un buen libro, aprovechar para hacer manualidades o irte de viaje. Pero si tienes dos meses de vacaciones de verano, también puedes aprovechar ese tiempo (o parte de él), para mejorar tu currículum y crecer profesionalmente. ¿Cómo?
Teniendo un trabajo de temporada alta. Canguro, profesor particular, recepcionista, ayudante de cocina o guía turístico son algunas de las oportunidades laborales que se ofrecen en verano. Aprovéchalas para ganar algo de dinero, que seguro que te irá muy bien para el resto del año, y a la vez mejorarán tus aptitudes y habilidades. Si estudias magisterio, dar clases de repaso te irá muy bien. O si quieres dirigir tu carrera hacia el sector turístico, seguro que aprendes mucho como recepcionista de un hotel o guía turístico. Y aunque el trabajo que encuentres no esté relacionado directamente con lo que estudias, te aportará una experiencia laboral que será impagable.
Haciendo prácticas laborales. En este caso, la remuneración económica no es lo más importante, lo más importante es el contacto con el mundo laboral real dentro del sector en el que nos queremos mover. Podremos hacer contactos profesionales y nuevas amistades. Y seguramente que también podremos poner en práctica lo aprendido durante el invierno.
Siendo voluntario. Es una buena forma de ganar experiencia, ampliar conocimientos y sentirnos útiles para la sociedad. Escoge una entidad o institución con la que compartas filosofía y objetivos y hazte voluntario. Será una experiencia muy valorada en los procesos de selección y también harás nuevas relaciones personales y profesionales que seguro que te enriquecerán.
Formándote. El verano es un buen momento para hacer cursos de formación complementaria que no hemos podido hacer durante el invierno por falta de tiempo. Haz un curso intensivo de un idioma, apúntate a un curso de especialización dentro de tu área, aprende a usar herramientas tecnológicas que te sirvan para el desempeño de tu carrera profesional o mejora habilidades como la comunicación en público, el liderazgo o el trabajo en equipo. Hay una extensa oferta de cursos de verano muy interesante, tanto presencialmente como vía online.
Abriendo tu blog. Ya sabes que el blogging es uno de los hobbies más bien valorados por los reclutadores. ¿Por qué no aprovechas las vacaciones de verano para diseñar el tuyo? Decide sobre qué quieres escribir, haz un calendario editorial para el blog y empieza a dotarlo de contenido. Puedes aprovechar también para diseñar la estrategia para tu marca personal.
