Aprende a organizar tu tiempo para hacer lo que te gusta
Seguramente sean muchos los días en los que pienses que no tienes tiempo para nada. Sin embargo, sabiéndose organizar y dando prioridad a lo realmente importante, podrás hacer todo lo que te propongas. Y no solo en tu día a día, sino a largo plazo. Aprende a organizar tu tiempo y te sentirás mucho más realizado.
Además, sacando el máximo partido a tu jornada, resultarás mucho más productivo en todo lo que te propongas. No está nada mal, ¿verdad? Queremos que lo logres y, por eso, a continuación te mostramos un listado con los mejores consejos para organizar tu tiempo.
Cómo optimizar la gestión del tiempo
Aprender a ser organizado es una habilidad y, como tal, es susceptible de ser mejorada. La práctica te ayudará a ir seleccionando aquellas actividades urgentes, las importantes y las triviales para darles a cada una la prioridad que se merecen.
Debes ser consciente de las horas que te lleva realizar cada tarea, del número de actividades que eres capaz de realizar cada día, de asumir la responsabilidad de aquello que realmente te compete, de decir no cuando sea necesario, de relegar o poner límites y, por supuesto, pedir ayuda cuando la necesites.
1. Identifica en qué empleas tu tiempo
Basta con que analices en qué empleas tus horas diarias. Si es necesario, escribe en papel las tareas que realizas cada día y cuánto tardas en realizarlas. Es más, podrías aprovechar algunas de las aplicaciones de gestión de tiempo para smartphones para que te resulte más sencillo.
Esto te dará una idea de todo lo que haces diariamente. Además, podrás identificar de un solo vistazo si todo lo que te propones para la jornada es realmente necesario o no te aporta nada. Es un buen momento para eliminar tareas improductivas que no te llevan a nada.
2. Céntrate y no te distraigas
Haz una sola cosa cada vez. Lo de la multitarea está muy bien para las máquinas pero nuestro cerebro necesita concentrarse en una sola cosa para ser lo más productivo posible. Por ejemplo, si necesitas redactar un texto intenta no coger llamadas ni distraerte con emails. Recuperar la concentración inicial para seguir con la redacción te costará un tiempo muy valioso. Quien llame o te haya escrito en ese momento podrá volver a hacerlo o esperar tu respuesta cuando hayas terminado. No hay nada tan urgente como lo que estés haciendo en ese momento.
En el trabajo como en el estudio, es importante que te marques las horas. Por ejemplo, de 8 a 9 mira el correo y contesta mails; de 9 a 11 estudia o redacta informes; de 11 a 13 reúnete con tus compañeros de trabajo o resuelve dudas de estudio… De esta manera te dará tiempo a hacer todo lo que te hayas propuesto y evitarás distracciones inoportunas.
Si necesitas ayuda a la hora de concentrarte, la técnica pomodoro o el mindfuldness te servirán de gran ayuda. Además, debes lograr que tu lugar de trabajo esté libre de distracciones. Evita cachivaches, papeles que no necesites en ese momento, el móvil sobre la mesa, material de oficina extra…
3. La agenda es tu amiga
Ya sea digital o de papel, llevar al día una agenda te ayudará a organizar tu tiempo de manera efectiva. Planifica tu día al detalle, independientemente de si son temas laborales o personales. Lo importante es que obtengas el mayor rendimiento posible de tu tiempo y, solo lo conseguirás si sigues tu planificación al pie de la letra.
Por mucha memoria que puedas tener, no confíes todo a tu cerebro. El llevar una agenda con objetivos a corto, medio y largo plazo permitirá que no se te quede nada en el tintero y puedas ir comprobando que cumples con tus metas y propósitos.
Si no lo has hecho con anterioridad, es posible que te cueste un poco comenzar a llevar tu planificación en una agenda. No te preocupes, repitiendo el proceso diariamente lo convertirás muy pronto en un hábito y cada vez te resultará más sencillo.
4. Identifica qué es urgente y qué es importante
La mayoría de las veces lo urgente no es importante. Nuestro día a día puede estar repleto de ‘urgencias’ que no nos sirvan de nada. Debes identificar qué es lo realmente importante para poderle dar la prioridad que se merece. ¡No pierdas el tiempo con banalidades!
5. Revisa tus planificaciones
No es suficiente con que apuntes las cosas en la agenda. Es muy recomendable que le eches un vistazo semanal para comprobar cómo ha ido todo. Será la manera de verificar que todo lo que anotaste te resultó valioso y poder descartar aquello que solo te hizo perder tiempo. Además, estas revisiones te ayudarán a confirmar qué periodos empleas para cada tarea, lo que te permitirá mejorar la planificación de la semana siguiente.
Una vez que has aprendido a organizar tu tiempo para hacer lo que te gusta llega el momento de definir tu propósito de vida. Llevar una planificación de tu día a día permitirá que identifiques qué es lo que realmente quieres hacer. De esta forma, podrás marcarte objetivos a cumplir para que tus aspiraciones se hagan realidad. ¿Cuáles son tus sueños? Anímate y cuéntanoslos, estaremos encantados de leerlos.