No importa el sector profesional al que pertenezcas, las grandes empresas buscan trabajadores capaces de confiar en sus compañeros y solucionar problemas de forma conjunta. De hecho, tal y como te contábamos en este post, es una de las competencias más valoradas por los reclutadores a la hora de contratar titulados universitarios.
Los retos deportivos mantienen la competitividad entre trabajadores, pero fomentando el teamwork Share on XPor eso, no es de extrañar que los departamentos de Recursos Humanos quieran mantener la buena sintonía de sus empleados y, para ello, busquen actividades divertidas, con las que motivar y unir a su plantilla. Los retos deportivos son, sin duda, una opción interesante para mantener la competitividad entre trabajadores, pero fomentando la confianza y el trabajo en equipo. ¿Conoces los siguientes?
- Spartan Race
Seguro que has oído hablar alguna vez de esta carrera de obstáculos, en la que hay que saltar muros de más de 2 metros de altura y bucear en el barro en busca de monedas, entre otras pruebas, para saltar la fogata final y alcanzar el arco de la meta. Muchas empresas ya han participado en la carrera tradicional, que es de por sí un reto, pero desde hace unos meses es posible personalizar la actividad con un evento corporativo en el que trabajar las áreas que necesita mejorar cada empresa. Eso sí, siempre con una filosofía muy presente: el trabajo en equipo.
- Triatlón súper-sprint
El triatlón es una de las disciplinas más duras del deporte, ya que exige a los participantes correr, nadar y montar en bicicleta durante muchos kilómetros y sin apenas descansar. Como seguramente toda la plantilla no esté preparada para una actividad deportiva de este tipo, se puede optar por una variante más corta, conocida como triatlón súper-sprint, y realizarla por relevos. Así, cada grupo de trabajadores tendrá que decidir quién es el mejor corriendo, quién lo es nadando y quién monta mejor en bicicleta para intentar completar el circuito antes que los demás grupos.
- Powerade Non-Stop Madrid Lisboa
Esta propuesta solo es apta para las plantillas más valientes, ya que la exigencia física del reto es altísima. En teoría, hay que recorrer en solitario los 770 kilómetros que separan Madrid y Lisboa, aunque en Adeccorientaempleo creemos que lo mejor es dividir esfuerzos y lograr un objetivo común. Por eso, las empresas más atrevidas pueden formar grupos de trabajadores que quieran participar para que ellos solos decidan cómo afrontar este reto. Tendrán que hablar entre ellos, planificar las etapas y, de nuevo, conocer las habilidades de cada integrante para sacar el máximo partido de todos. ¡Justo lo que necesita una empresa: profesionales comprometidos y unidos por un objetivo común!
