20 preguntas que debes hacerte antes de buscar trabajo

Posiblemente estés acostumbrado a que te digan cómo debes prepararte para las preguntas de una entrevista de trabajo. Cualquiera que esté intentando conseguir un empleo intenta obtener toda la información necesaria para pasar ese cuestionario que le da el pase a un trabajo. Sin embargo, pocas veces nos planteamos qué preguntas debes hacerte antes de buscar trabajo.

El tema tiene su importancia y, de hecho, te ayudará a esclarecer muchas cuestiones que te planteas y que, con una respuesta adecuada, te permitirá enfocar mejor tu búsqueda y conseguir el trabajo que realmente quieres.

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Las 20 preguntas que te ayudarán a buscar trabajo

Sí, aunque parezca lo contrario, dar respuesta por tu parte a los interrogantes que te planteamos, te ayudará a que tu búsqueda de empleo esté mejor orientada y a que no pierdas tiempo en opciones que realmente no se ajustan a tu perfil.

Contestar a estas interpelaciones precisa, por tu parte, la mayor sinceridad. Solo de este modo obtendrás respuestas que te descubrirán aspectos esenciales para que consigas el trabajo de tu vida, el salario emocional que buscas o los asuntos no negociables para ti, por poner algunos ejemplos.

1. ¿Qué requerimientos no admiten negociación?

Empecemos precisamente por aquí. Tómate un momento para meditar sobre el asunto y anota aquellas cosas que son importantísimas para ti. Se trata de dilucidar cuáles son los puntos que no admiten negociación.

Quizá se trate de la flexibilidad horaria, de las prácticas morales de la empresa, el ambiente laboral… Anota lo que realmente es fundamental para ti y no temas decir que no a un puesto que incumpla la lista con las cuestiones que consideras más importantes.

2. ¿Cuáles son mis habilidades?

No se trata de que te enfrasques en un listado de calificativos positivos acerca de tus capacidades como empleado/a. Eso podría hacerlo cualquiera. Lo realmente importante en este caso es que visualices ejemplos específicos de tu trayectoria laboral. Esos en los que has demostrado tus habilidades.

Céntrate en alguna acción que ofreciera valor añadido a la compañía, que mejorase las soluciones de algún cliente, que marcaran tu diferencia con el resto de los postulantes a un empleo…

3. ¿Cómo deseas que sea tu futuro?

Antes de buscar trabajo es vital que sepas con claridad cómo deseas que sea tu futuro laboral. ¿Busca que te ofrezcan la oportunidad de una carrera profesional? ¿Deseas acceder a formación continua? ¿Prefieres conciliación? ¿Tal vez que tu puesto no resulte monótono y repetitivo?

Disponer de respuestas claras a estas preguntas te ayudará a que puedas elegir mejor el tipo de trabajo que necesitas.

4. ¿Adquisición de habilidades y experiencia?

Focaliza aquellas habilidades que deseas adquirir o mejorar. Piensa en qué tipo de experiencias esperas poder vivir en el futuro. Un ejemplo que nos sirve para ilustrar este punto del listado puede ser el tema de la movilidad geográfica.

Pongamos, por ejemplo, que eres una persona inquieta a la que le fascina viajar y conocer mundo. Sería algo a considerar antes de buscar trabajo. Lo mejor para ti, está claro, es un puesto en una compañía que requiera de ti hacer viajes constantes.

Sin embargo, podría ocurrir lo contrario. Si te caracterizas porque no te gusta desplazarte de tu ciudad, tendrías que apostar por una empresa que te ofrezca un puesto en el que no se exige movilidad geográfica.

5. ¿Quieres facilidades de promoción?

Para muchas personas resulta fundamental que la empresa en la que trabajan les facilite la promoción interna. Escalar posiciones y contar con la posibilidad de ascender paulatinamente es de lo más atractivo para ellos.

Piensa si esto es importante para ti. En el caso de que la carrera profesional no sea lo más importante para ti, también conllevarías ventajas, ya que podrías acceder a una mayor variedad de puestos.

6. ¿Dónde admites flexibilidad?

Baraja también aquellos requisitos en los que podrías actuar de una manera más flexible. Piensa que es igual de importante contar con bazas que puedan ser sacrificables, a cambio de obtener otras ventajas más considerables para ti. Ten claro a qué puedes renunciar para obtener un buen empleo.

7. ¿Nivel de autonomía?

¿Eres un profesional al que no le importa sentirse supervisado por su jefe? ¿Te gusta el trabajo en equipo? Por el contrario, ¿prefieres ir por libre y gozar de mayor autonomía a la hora de desempeñar tus labores? Piénsatelo bien antes de buscar trabajo y pon tus miras en empresas cuyas prácticas coincidan con tu actitud.

8. ¿Cuál es tu nivel de compromiso?

Cuestiones como la conciliación entre tu vida laboral y personal, los largos trayectos para ir y volver del trabajo u horarios muy encorsetados pueden resultar frustrantes. Atrévete a analizar tu nivel de compromiso y, si predomina tu calidad de vida, busca un empleo que cumpla con tus expectativas.

9. ¿Qué beneficios son importantes para ti?

Si el salario no lo es todo para ti, puedes que te hayas planteado otro tipo de compensaciones. Hoy en día es habitual que las compañías pongan a tu alcance servicios y prebendas muy motivadoras.

Te pueden resultar muy interesantes algunas iniciativas empresariales, desde que te proporcionen un clásico como el uso del coche de empresa hasta paquetes que incluyen tickets de restaurante, el uso del gimnasio en las propias instalaciones de la compañía, que te faciliten dispositivos móviles y se encarguen de su facturación mensual, seguro médico privado, cheque guardería y, en algunos casos, incluso poder ir al trabajo con tu perro.

Un buen paquete de beneficios de empresa puede estar valorado en cientos de euros mensuales. Debes meditar sobre ello y el ahorro que te puede suponer disfrutar de un puesto en el que puede que el salario en cash no sea tan elevado pero las compensaciones resulten muy interesantes.

10. ¿Tienes claro tu salario?

Ante todo no pierdas la noción de la realidad en cuanto a tu perspectiva salarial. Esta es una de las cuestiones esenciales que debes plantearte muy concienzudamente antes de buscar trabajo.

Por ejemplo, si tu prioridad está centrada en conseguir un puesto de trabajo determinado, tal vez debas renunciar a tu salario ideal y conformarte con uno más pequeño. Claro que también tendrás que hacer números y ver si te lo puedes permitir. Haz cálculos sobre cuánto gastas mensualmente y cuánto precisas para vivir desahogadamente.

De todos modos, evalúa tus cualidades como profesional y averigua tu tasación en el mercado laboral. No te cortes a la hora de solicitar un salario más acorde con tu valía.

11. ¿Cómo afectará a tu familia?

¿Tienes personas a tu cargo? ¿Tienes pareja? ¿Tienes hijos? Son tres cuestiones que debes tener en cuenta antes de buscar trabajo. Tu vida y la de ellos puede verse afectada por horarios, compromisos derivados del cargo, viajes… Valora en qué medida se alterará tu rutina y cómo repercutirá en tus allegados.

12. ¿Cuál es el modelo de compañía que te atrae?

Visualiza cómo te sientes más cómodo, ¿trabajando para una pyme o en una multinacional? Estarás de acuerdo en que la mejor compañía no tiene por qué ser el emporio más famoso. Tienes que plantearte si buscas una plaza dinámica o si el trabajo bajo presión dinamitaría tus niveles de estrés.

Tal vez te aburra un empleo tranquilo y un ritmo de trabajo más sosegado. ¿Te encanta el contacto directo con el público o prefieres estar en la retaguardia? Las respuestas a preguntas de este tipo te darán el perfil de empresa en el que estás interesado.

13. ¿Cuál es tu ambiente laboral ideal?

Esta pregunta antes de buscar trabajo va enfocada directamente al nivel de sociabilidad que deseas laboralmente. A lo mejor eres de esas personas que disfrutan con el trabajo en equipo y campa a sus anchas en empresas con plantillas numerosas.

Sin embargo, si esto no va contigo, tendrás que buscar una oferta de trabajo que te permita, por ejemplo, trabajar en solitario.

14. ¿El puesto de trabajo se ajusta a mi planning de carrera?

Es posible que tengas ideado cómo será el recorrido que debes hacer para alcanzar tus objetivos. Te has planteado una carrera profesional y tienes que aclararte. ¿El empleo se ajusta a tus previsiones y a tu planning con respecto a tu carrera profesional?

En este caso, la respuesta a la pregunta puede ser afirmativa o negativa y no por ello debe conllevar el rechazo de un nuevo trabajo. En ocasiones, es importante salirse un poco de la línea marcada. Puedes encontrarte con sorpresas agradables tomando el camino que no te habías planteado, aunque debes estar muy seguro.

15. ¿De qué manera tasarán mi éxito?

Preguntar directamente es la forma más directa y fiable de informarte sobre lo que esperan de tu incorporación a la compañía. No tengas reparo a la hora de realizar algunas preguntas durante una entrevista de trabajo.

Procura que te aclaren cómo se va a medir tu éxito, cuáles son los objetivos que tendrás que alcanzar y qué esperan de ti con respecto al nuevo trabajo. Aclarar estas cuestiones te permitirá saber, de una forma más objetiva, a qué tipo de puesto estás postulando y si te interesa o no.

16. ¿Dónde me gustaría estar a medio y largo plazo?

Este planteamiento resulta básico para poder dirigir tu carrera profesional por los derroteros adecuados. Debes trazar tu estrategia profesional para que tus pasos te conduzcan a las metas que te has planteado a medio y largo plazo. Si lo tienes muy claro, sabrás si un empleo o una determinada empresa te interesa o si debes dejarlos pasar y seguir buscando.

17. ¿Estoy alineado con la cultura empresarial?

Si eres una persona con un marcado perfil ético, tal vez estés buscando una empresa con cierto tipo de cultura corporativa. Podrías buscar que apoye ciertas causas: comercio justo, medio ambiente, derechos sociales…

No temas a la hora de realizar preguntas sobre el perfil de la compañía en este ámbito. También puedes buscar información acerca de sus compromisos y sus actuaciones éticas a través de alertas de noticias y de su página web corporativa.

18. ¿Qué táctica debo emplear durante el proceso de búsqueda activa?

Continúan existiendo métodos tradicionales, como el boca a boca o los anuncios en prensa. Pero, no puedes olvidar que estás en la Era Digital. Utiliza internet y todo lo que te ofrece: plataformas de trabajo, portales de empleo, redes sociales… Estas opciones te pueden orientar acerca de los perfiles que buscan las empresas.

Sigue a las compañías para las que te gustaría trabajar. Para eso dispones de Twitter, Facebook y, sobre todo, LinkedIn. Procura, a través de las RR.SS., estar a la última sobre estas empresas y qué opinan sus empleados. Usa también sus páginas web y suscríbete a las newsletters.

19. ¿Tengo actualizado mi currículum y mis perfiles en redes?

Es fundamental que traces una rutina para que tu CV se encuentre actualizado en todo momento. Añade cada nueva experiencia profesional y, también, aquella formación que vayas adquiriendo. Tu currículum debe estar vivo.

Del mismo modo, debes proceder realizando esta tarea con tus perfiles en RR.SS. En especial, procura que tu perfil de LinkedIn esté absolutamente optimizado. En la actualidad, los headhunters realizan búsquedas a través de esta red, que es la mayor del mundo dedicada a profesionales. Visitan los perfiles para cazar talentos y encontrar a los candidatos idóneos para sus puestos vacantes.

20. ¿Con qué ayudas cuento para encontrar empleo?

Debes recordar que las consultorías y las agencias son buenos cauces para encontrar aquel puesto que se asimile a tus habilidades y nivel de experiencia. Si has contestado a todas estas preguntas antes de buscar trabajo, tendrás muy claro lo que andas buscando. En portales de empleo, como el de Adecco, puede estar esperando el trabajo de tu vida.